sábado, abril 12, 2008

La melena de Medusa


Medusa estaba cansada de su peculiar melena. No porque ahuyentara a todo aquel con el que pretendía mantener una conversación, sino porque era incómoda. Cuando las serpientes no discutían entre ellas, la atosigaban a base de preguntas o reclamaciones de atención. Los psicólogos lo llamaban esquizofrenia, pero ella prefería considerarlo un problema capilar. Lo peor de todo era mantener la cabeza erguida, y es que aquella centena no era precisamente ligera

Medusa estaba decidida a cortar por lo sano. Y nunca mejor dicho.

Sin embargo, no fue tan fácil.

Los peluqueros se negaban a ayudarla; eran muy respetuosos con los animales y con el medio ambiente. Varios de ellos la amenazaban con denunciarla.

Entonces, se encontró con un hombre trajeado que le ofrecía millonadas por su melena. Le decía que podía darle un buen provecho traducido en un negocio de correas de relojes y carteras. Medusa se negó, ya que no se fiaba de alguien que tenía los mismos ojos que las inquilinas de su cabeza.

Por la noche, las serpientes mecieron a Medusa en una nana de lágrimas, súplicas y besos. Y ella, por primera vez, se sintió querida.

Las serpientes dejaron de pesarle a Medusa.


Mun, the Snake-haired Doll

Fotografía: Medusa, de Morween

12 recogieron sus pétalos:

Laura Luna dijo...

Me encanta Medusa. Podría dedicarle cientos de cuentos y poemas. Esta tarde, mientras hacía mis tareas, ha surgido esta idea en mi cabeza. Eso, y el deseo de ensayar la técnica del microrrelato han dado fruto a este cuento.

Dentro de nada, más de Nebuloso (y de Tifona, y de Borrón...)

Besos a todos,
Mun

TORO SALVAJE dijo...

Me gustó sobre todo el final, imaginarme a las serpientes rogándo por su vida a Medusa y a ella accediendo ha estado muy bien.

Y que se sintiera querida.

Me ha gustado mucho.

Besos Mun.

Matarratas dijo...

mala Medusa, se lleva las almas de los hombres puros...

Klover dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
Klover dijo...

Debo tener cierto módulo "activador del final feliz" un tanto podrido porque...esperaba que el cuento acabaría con el asesinato de Medusa por parte de sus inquilinas capilares...pero tu visión es mucho más entrañable, donde va a parar.

Esperamos a Nebuloso & co...;)

Un beso gordo

Pedro dijo...

:OOOOOOOOOO ¡Es un cuentecillo encantador! Es tierno. Jamás imaginé que a un monstruo tna vilipendiado se le pudiera sacar tanto partido. Aunque claro, si te gusta a ti, no puede ser tan malo ;)


Un abrazo,

Pedro.

[ кeя ] dijo...

a mi tb me ha gustado el relato, una buena idea y original. yo tb habia pensado que las serpientes se la cargarian para que no las vendiera al hombre ese XD pero mejor que tenga un final... mas inesperado y -como han dicho por ahi- entrañable.
saludos
!danger

Pugliesino dijo...

Al igual que la propia Medusa ejercía ese poder paralizador a quien osaba mirarla,tu incursión en el microrrelato casi que causa el mismo efecto.Te animo a que no se quede en un ensayo (no tienes que ensayar nada que los escribes genial Mun) y escribas muchos más!
El llevar la obra a caballo entre el pasado y la actualidad,la amena lectura y el hallar ese corazón en las entrañas del monstrúo,y todo en apenas unas líneas dejan el ensayo en una realidad fantástica!
Un abrazo enorme!

tormenta dijo...

Mi niña, qué original!
Qué diferente, qué bueno… no sé vamos, que me ha encantado.
Te ha quedado estupendamente, tienes que seguir con el microestilo ^^ porque promete
Un besazo princesita, espero de verdad, que cada día estés un poco mejor

Anónimo dijo...

Me encanta, adoro el simbolismo con el que está plagado este pequeño relato.
No hay frase que sobre ni que falte, y cada una tiene una gran fuerza y mensaje.

Que los "problemas capilares" nunca os pesen, pues tarde o temprano se revelarán su verdadero significado :)

Y por supuesto, nunca os fieis de alguien con ojos siseantes...

Un besazo, preciosa!

Camille Stein dijo...

una historia de una imaginación desbordante

un cuento precioso

me gustó especialmente cómo lo concluyes, esa frase definitiva


un beso

Óscar Sejas dijo...

Nunca es tarde si la dicha es buena, dijo alguien alguna vez. Tu blog está plagado de pequeñas joyas, pero quizás por vagueza no me he dedicado a descubrirlas como se merecen.

Ayer me pasaste una, hoy otra...y cada vez me sorprenden más y más. Al final, tal y como te prometí, tendré que leerme tu blog de cabo a rabo.

Sólo decirte que me ha gustado, me ha hecho recordar que todos tenemos nuestra parte buena, quizás ese era el verdadero significado del texto.

Un abrazo Mun.